El ciervo y la ardilla

Mujer Vaso Frágil Pero Firme


En un frondoso bosque, un ciervo se jactaba de sus grandes y hermosos cuernos, mientras que una pequeña ardilla trabajaba arduamente recolectando nueces para el invierno. Un día, el ciervo se encontró atrapado en una red de cazadores, incapaz de liberarse.

La ardilla, al escuchar los lamentos del ciervo, decidió ayudarlo. Con sus afilados dientes, roía la red poco a poco hasta que el ciervo quedó libre. Agradecido, el ciervo prometió proteger a la ardilla y su alimento durante el invierno.

Moraleja: No subestimes a los demás por su tamaño o apariencia; las habilidades y la bondad vienen en todas las formas.


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